miércoles, 29 de junio de 2011

El papel de las dakinis en la iconografía tibetana




La pintura que os ofrecemos en esta entrada es un Tangka de la escuela tibetana de arte Binod, pintada según el estilo Menri. Y nos puede ser útil para contextualizar mejor algunas de las cosas que hemos apuntado sobre el tema de las dakinins en la mitología tibetana.
Este trabajo fue pintado siguiendo lo que nos indica una descripción de un texto sobre las cualidades de la deidad venerada por la tradición Sakya: Nos muestra a Hevajra y su consorte Nairetyma rodeados de ocho ḍakinis. Bajo su cabeza hay un Buddha, Vajradhara (Dorje Chang) esta en el centro, Sachen Kunga Nyingpo a la izquierda y Virupa a la derecha.
Se entiende que una obra de este tipo tiene una función muy determinada que es la de producir un efecto entre los que las contemplan y que entienden la historia que cuenta el texto. Hevajra y su esposa Nairetyma están realizando una unión sexual o asana tántrica en la postura que se denomina Yab-Yum. El Buddha bajo su cabeza les esta iluminando y los dioses tántricos que los budistas tibetanos tomaron en parte de la tradición Bön los rodean. Entre ellos están las dakinis que son los que les han llevado a la prueba que conduce a la iluminación. El papel de las dakinins no es sexual en la forma en la que nosotros lo entendemos, más bien se usa ese camino como forma de lograr un mejor control de los procesos de la mente en la forma habitual eclectica y practica que tiene en estos casos el budismo tibetano.

domingo, 19 de junio de 2011

Mantra como Mandala


Mandala tibetano con un mantra escrito alrededor.

Mándala es un término de origen sánscrito, que significa diagramas o representaciones simbólicas bastante complejas, utilizadas tanto en el budismo como en el hinduismo.

maṇḍala, en el sistema IAST de transliteración del idioma sánscrito.
मण्डल, en escritura devanagari del sánscrito.
Pronunciación: [mándala]
Etimología: ‘círculo’.
El Diccionario de la lengua española de la RAE acepta tanto la versión etimológica «mándala» (pronunciada esdrújula) como la usual española «mandala» (pronunciada llana).

Concepto

Los mándalas son diagramas o representaciones esquemáticas y simbólicas del macrocosmos y el microcosmos, utilizados en el budismo y el hinduismo. Estructuralmente, el espacio sagrado (el centro del universo y soporte de concentración), es generalmente representado como un círculo inscrito dentro de una forma cuadrangular. En la práctica, los iantra hindúes son lineales, mientras que los mándalas budistas son bastante figurativos. A partir de los ejes cardinales se suelen sectorizar las partes o regiones internas del círculo-mándala.

Por otra parte, la mayoría de las culturas posee configuraciones mandálicas o mandaloides, frecuentemente con intención espiritual: la mandorla (almendra) del arte cristiano medieval, ciertos laberintos en el pavimento de las iglesias góticas, los rosetones de vitral en las mismas iglesias; los diagramas de los indios pueblo, etcétera.

Es muy probable que esta universalidad de las figuras mandálicas se deba al hecho de que las formas concéntricas sugieren una idea de perfección (de equidistancia con respecto a un centro) y de que el perímetro del círculo evoque el eterno retorno de los ciclos de la naturaleza (tal como en la tradición helenística lo proponía, por ejemplo, el uróboros).

A su vez, en los rituales mágicos es frecuente la separación de un espacio sacro respecto de uno profano; para esto, en la tradición del ocultismo occidental, se ha recurrido y recurre a los círculos mágicos; el espacio sacro —o al menos el del ritual— es el inscripto en tales círculos que, de este modo, cumplen funciones análogas a los mándalas orientales.

Esta universalidad de los mándalas hizo que el psiquiatra Carl Gustav Jung los privilegiara como expresiones probables de lo inconsciente colectivo. Para Jung, el centro del mándala figura al sí-mismo (Selbst), que el sujeto intenta lograr perfeccionar en el proceso de individuación.

Otras acepciones sánscritas

Mándala budista del Buda Vairochana rodeado de ocho adibuddhas y Bodhisattvas.
Según el Sanskrit-English Dictionary (diccionario sánscrito-inglés), de Sir Monier Monier-Williams, el término sánscrito mándala significa:
  • círculo.
  • disco (especialmente el del Sol o de la Luna).
  • óvalo.
  • círculo sagrado (según el Diviā-vadhāna).
  • círculo encantado de un conjuro (según el Śatapatha-brāhmana).
  • cualquier cosa redonda (aunque según el Chaturvarga-chintāmani de Jemadri, también significa ‘cualquier cosa triangular o cuadrada’).
  • circunferencia.
  • halo alrededor de la Luna o el Sol (según el Brijad-samjitá de Varaja Mijira).
  • órbita de un cuerpo celeste (según el Suria-siddhanta).
  • pelota para jugar (según el Majá-bharata).
  • marca redonda realizada en la piel con una uña (en el Latiaiana, el Kathaka-grijia-sutra, y la literatura erótica hindú).
  • vendaje circular (en cirugía).
  • erupción cutánea o tipo de lepra con llagas circulares.
  • espejo (también daarpana "da vanidad").
  • una de las diez divisiones del Rig-vedá, por autor (están divididos en 85 anuvākas o lecciones, y éstas a su vez en 1087 sūktas o himnos).
  • posición particular para disparar flechas.
  • ordenamiento circular de tropas (en el Majá-bharata y el Kamandakíia-niti-sara).
  • distrito, territorio, provincia (agregado a veces al final de los nombres modernos, según el Majábharata, el Átharva-veda-pariśishta e inscripciones lugareñas).
  • pequeños reinos lejanos y cercanos que rodean a un rey, con los que se mantienen relaciones diplomáticas o políticas (se enumeran 4, 6, 10 o incluso 12 de esos Estados), según las Leyes de Manu.
  • multitud, grupo, banda, colección, cuerpo completo, sociedad, compañía (según Iagña Valkia, el Majábharata y la literatura kavia).
  • tipo de serpiente.
  • el mándala-nritia es un tipo de danza circular, que bailaron las gopīs alrededor de Rādhā y Krishna.

El mándala como relajación

Dentro de las múltiples técnicas de relajación orientales, se encuentra la de pintar mándalas, los cuales son publicados en libros parecidos a los de los libros de colorear de los niños, donde viene el mándala sólo dibujado con líneas y el resto en blanco dispuesto para colorear. Esta técnica de relajación no requiere ninguna disciplina expresa, como puede serlo en otras, ya que quien está haciéndolo lo colorea según sus gustos estéticos e imaginativos. La pueden realizar personas de cualquier edad, siendo además que fortalece la creatividad.

Mandala del Buda Sakyamuni, pintura tibetana.

Mandala budista del Buda Vairochana rodeado de ocho adibuddhas o Bodhesattvas.

  • Jung, Carl Gustav (2002). Obra completa. Volumen 9/I: Los arquetipos y lo inconsciente colectivo. Sobre el simbolismo del mándala (1938/1950). Mándalas (1955). Madrid: Trotta. ISBN 978-84-8164-524-8/ ISBN 978-84-8164-525-5.
  • Jung, Carl Gustav (2005). Obra completa. Volumen 12: Psicología y Alquimia (1944). II. Símbolos oníricos del proceso de individuación. 3. El simbolismo de los mándalas. Madrid: Trotta. ISBN 978-84-8164-704-4/ ISBN 978-84-8164-717-4.
  • Monier-Williams, sir Monier. A Sanskrit-English Dictionary. (Oxford, 1872). Nueva Delhi: Motilal Banarsidass (2.ª edición), 1899.
  • Giuseppe Tucci (1974). Teoría y practica del mándala. Barcelona: Barral editores. ISBN 84-211-7388-X.